domingo, 15 de septiembre de 2013

Ellos

Él caminaba contra la corriente, recortada su silueta por la lluvia y por las luces de los autos que delataban su andar estropeado por los años, con esos pasos altos pero cortos, como marchando, con el maletín de médico de la época de la revolución siempre en la mano izquierda.  


Él se sube al micro, que va medio vacío, se equilibra con dificultad y cruza unas cuantas palabras con el conductor. Es rubio y extranjero, lo descubrimos cuando comienza a hablar de arte y cultura. Nos declama un poema bien aprendido de memoria, con todas sus mímicas, brindándole flores a la nobleza, la fraternidad y la buena voluntad, y cierra su presentación pidiendo una ayudita para comprar una guitarra, para que con ella, en una próxima oportunidad, nos pueda regalar una canción.